El achiote es una pequeña semilla de su arbusto originario de Ámerica y cientificamente llamado Bixa orellana.
El achiote se utiliza como condimento en muchas cocinas de Latinoamérica y del Caribe. Las semillas son muy duras, así que tendremos que molerlas, convertirlas en una pasta o infundirlas en agua o en aceite.
La planta del achiote es utilizada con frecuencia en la gastronomía como colorante y saborizante, muchas veces sin saber que sus semillas, pulpa y hojas también pueden aprovecharse con fines medicinales.
Protege la vista de los rayos UV
El colorante obtenido de las semillas del achiote está compuesto principalmente por un carotenoide o pigmento orgánico llamado bixina. Uno de los más grandes beneficios de este pigmento es su capacidad para proteger la salud ocular.
¡Así es! Debido a que la bixina representa más del 80% de los pigmentos presentes en el achiote, esta planta protege nuestros ojos de los rayos dañinos, ya que este componente ayuda a absorber los rayos UV que afectan nuestra vista.
También actúa como un antioxidante para el sistema ocular, cataratas, ceguera prematura y la prevención de la degeneración macular (pérdida de las áreas del centro del campo visual) y otras enfermedades en los ojos.
Retrasa el envejecimiento
Los pigmentos presentes en el achiote también son potentes antioxidantes que retrasan los signos del envejecimiento, luchando contra los radicales libres que destruyen las células.
Un buen consejo para aquellos que buscan una solución anti-aging es la pasta de achiote que se hace de las semillas y se puede aplicar para reducir los signos de arrugas, manchas y otras imperfecciones de la piel.
Además, protege la salud en general. Algunos estudios han demostrado que las personas que consumen alimentos procedentes de carotenoides naturales como el achiote sufren menos enfermedades crónicas y viven más tiempo que aquellos que no consumen.
Previene el cáncer
Otro carotenoide que se encuentra en la semilla del achiote es la norbixina, que también es un antioxidante. Se ha comprobado que la norbixina tiene función antimutagénica en las células sanas expuestas a las células cancerígenas.
Por lo tanto, la prevención de diversos tipos de cáncer es otro de los beneficios del achiote para la salud.
Cuida la piel
En caso de quemaduras, heridas o irritación de la piel, la pasta de semillas de achiote se puede aplicar para acelerar la curación y reducir la aparición de cicatrices. También funciona como repelente contra insectos y como protector solar.
Para estos usos se recomienda moler las semillas y aplicar el polvo sobre heridas y sobre la zona de la piel que se desee proteger del sol o de los mosquitos.
Mejora la digestión y alivia el dolor de estómago
Debido al alto índice de fibras presentes en la semilla y sus hojas, el achiote es muy bueno para la digestión y ayuda a mejorar la absorción de los nutrientes en el cuerpo.
Las semillas de achiote tienen una sustancia que se asemeja a la cera y que actúa como paralizante de los parásitos intestinales, por esta razón, es fundamental para la regulación de las funciones digestivas.
El achiote también se utiliza con frecuencia para el tratamiento de la acidez y otras molestias causadas por infecciones virales o por alimentos más irritantes.
Controla la diabetes y ayuda a perder peso
Ayuda a controlar la diabetes, ya que al disminuir los niveles del colesterol por la fibra, se regula la cantidad de insulina y glucosa en la sangre. Algunos estudios han confirmado las propiedades hipoglucemiantes de la planta e incluso en Brasil, las semillas de achiote se utilizan para tratar la diabetes.
Al poseer sustancias diuréticas y ayudar a reducir la glucosa en sangre, la grasa corporal disminuye, convirtiendo al achiote en un excelente aliado en la pérdida de peso.
Interesante, ¿no? El achiote es un ingrediente privilegiado que le traerá muchos beneficios a tu salud. Ahora que ya conoces sus propiedades, comienza a utilizarlo en tus recetas favoritas y obtén deliciosos y saludables platillos.